La población de esta
nación de las Islas Carolinas está creciendo y progresivamente van emigrando a los
centros urbanos, causando más polución, resíduos orgánicos, basuras, sobrepesca y
construcciones costeras. Todo esto afecta a los arrecifes. Los E.F.de Micronesia carecen de áreas marinas protegidas, y los
impactos del turismo van creciendo; la construcción de nuevos puertos, aeropuertos y
carreteras para servir a las masas de submarinistas ha degradado varios arrecifes.
No son sólo los turistas los que tienen
que ver con la rotura de los corales: en Marzo de 1994, el primer oficial de un carguero
de 200 metros de eslora, maniobrando para ver mejor a una mujer en top-less en la pequeña
isla de Satawal, embistió con su barco de 73.000 toneladas en mitad del arrecife
Wenimong, destrozando unos increíbles 16.000 metros cuadrados de coral.
Este arrecife era la principal fuente de
alimento de los 700 habitantes de la isla, que reclamaron a los propietarios del barco dos
millones de dólares por daños y perjuicios.
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