La Cabruza o Blenio
(Parablennius gattorugine)

lega a medir unos 30 cm. si bien normalmente llega a los 15/20 cm. Tiene el
cuerpo alargado y fino, con una cabeza más o menos redondeada de la que salen unos
tentáculos oculares grandes, ramificados y llamativos que recuerdan unos cuernecitos.

Tan solo tiene una aleta dorsal, más alta por delante que por detrás. El color es
marronoso con unas bandas laterales de color claro. Su piel no tiene escamas, sino unas
glándulas mucosas. Por esta razón también recibe el nombre de "babosa".
Vive en los fondos rocosos y en agujeros de las paredes, siendo más escaso en las
praderas submarinas. Se le encuentra desde unos 3 metros de profundidad hasta unos 30. No
se le encuentra en algunas zonas del Mediterráneo Oriental. En situaciones de agua
caliente (más de 20 grados) puede llegar a salir del agua durante breves periodos,
saltando a la superficie de las rocas de la zona intermareal de la costa.
Se alimentan de algunos tipos de invertebrados y algas. Esta especie es bastante activa
por la tarde, aunque se la puede observar durante todo el día. En el período
reproductivo, de Marzo a Mayo, las hembras buscan los territorios de los machos, siempre
alrededor de un agujero o accidente similar. Los machos, que son bastante
territorialistas, cuidan de la puesta hasta que los huevos eclosionan.
Estos blénidos, como todos los de su especie, se esconden en su madriguera cuando se
sienten amenazados, pero al cabo de un rato vuelven a sacar la cabeza, pues su curiosidad
es casi humana. En ocasiones se les puede ver asociados simbióticamente con camarones.
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