MINDORO
¿PARAÍSO, O UN LUGAR PARADISÍACO?
por Iñigo
Almenara
ncontrar
una definición exacta para esta isla del archipiélago Filipino, fue algo
que en realidad me llevo poco tiempo. Nada mas desembarcar de la pequeña
banca de madera, que nos trasladó desde el puerto de Batangas hasta la isla
de Mindoro, supe que habíamos llegado a un paraíso natural.
¿Por
qué no catalogarlo como lugar paradisíaco? Seguramente también se podía
hacer así, pero cuando en un lugar como éste vemos que la mano del hombre
apenas a alterado su equilibrio, bien vale la pena colgarle la etiqueta de
paraíso natural.....y que sea por muchos años.
MINDORO
Esta
isla, que debido a su amplitud se divide en Oriental y Occidental, es una
de las mas de siete mil que
componen el archipiélago Filipino.
Pueblecitos
construidos a lo largo de las orillas como Sabang, Portofino o Puerto
Galeras nos harán disfrutar de una naturaleza en todo su esplendor.
Antiguo
refugio de galeones españoles
que necesitaban refugiarse de los tifones, Puerto Galeras es hoy en día
una Reserva Natural de la Biosfera declarada por la UNESCO hace ya 40 años.
COCO
BEACH ISLAND RESORT
El
resort Coco Beach, se encuentra enclavado en una de las playas de la isla
de Mindoro, en la zona
oriental, a unos cien kilómetros de Manila, y a tan solo a unos diez
minutos de Puerto Galera, siempre y cuando nos traslademos por mar.
Seria
difícil hacer un dibujo exacto con mis palabras de este resort, por lo
tanto lo haré utilizando las
que ellos mismos usan ,y que son un signo inequívoco de lo mucho que aman
a este lugar.
Coco
Beach no quiere ser un resort de lujo, sino un pequeño lugar familiar,
ofreciendo un servicio simple, una belleza natural y la hospitalidad del
pueblo filipino.
Una
pequeña vuelta por los alrededores bastara para darse cuenta que esas
palabras se ajustan perfectamente a la realidad.
Todos
y cada uno de los elementos que componen el resort están perfectamente
integradas con la naturaleza del lugar.
Las
cabañas nos devuelven a la nostalgia de las películas de Tarzán y nos
hacen sentirnos como parte de una de estos films. Para
su construcción solo se han utilizado materiales obtenidos de la propia
selva como cañas de bambú, hojas de palmeras, etc. Los
caminos que nos llevan hasta ellas están adornados con miles de conchas
de moluscos que las mareas han ido arrastrando hasta la playa, evitando así
que al caminar descalzos pudiésemos resbalar.
Por
uno estos caminos ,siempre en el seno de una gran vegetación, llegamos
hasta uno de los lugares mas curiosos del resort, la lavandería. Dos
mujeres nativas agachadas, apoyando su cuerpo contra un piedra de lavar,
se encargar de sacar adelante este servicio. Sin perder la sonrisa en ningún
momento, algo que seguramente más de un europeo ya habría perdido hace
tiempo, responden como pueden a cada una de nuestras preguntas sobre la
dura labor que realizan
Siguiendo
el camino llegamos hasta el club de buceo, el cual nos ha sido muy
fácil de encontrar. Al contrario de lo que podíamos imaginar, no
se trata de una simple cabaña con unos cuantos equipos mal
cuidados y un compresor del tres al cuarto que con un ruido
ensordecedor recarga botellas de aluminio que
perdieron su baño de pintura hacia ya largo tiempo.
PHILIPPINAS
DIVERS: EL CLUB
El club, una cabaña
de dos pisos perfectamente cuidada, alberga en su interior decenas de
equipos en un estado de conservación impecable, así como un taller de
reparaciones repleto de herramientas.
A
la entrada de Philippinnas Divers, adornando las paredes, nos encontramos
con unos bocetos que nos dan una pequeña idea de
lo que nos vamos a encontrar en algunos de los lugares de inmersión.
Nuestras ganas por meternos en el agua van aumentando por momentos.
Una
cuidada biblioteca compuesta por varios libros sobre la fauna y flora y
del lugar esta disponible para su consulta durante todo el día, y lo que
es mas importante, poder hacerlo al
salir del agua todavía con las retinas
inundadas por imágenes que serán difíciles de olvidar.
El
grupo de instructores lo componen de 4 a 5 personas, repartidos entre
ingleses y nativos. La amabilidad es primordial y un buen primer contacto
con ellos nos hace presagiar que también lo serian las inmersiones
posteriores.
EL
BUCEO
Después de
cambiarnos y dejar todos nuestros enseres bien colocados en una de las múltiples
cajas que para ello hay dispuestas en el club, salimos con nuestros
equipos en la mano para embarcarnos en una de las tradicionales bancas de
madera que nos espera en las orilla. El paseo no se hace pesado, ya que
las botellas nos esperan en el interior y las bancas están fondeadas a
escasos cien metros del club.
SABANG
POINT
El primero de los
buceos que realizamos, fue en este lugar, denominado así por estar en
frente de uno de los maravillosos pueblecitos que lindaban con el
resort.
Después de escasos
tres minutos de navegación, llegamos a la zona de buceo. Tan solo algo
que reseñar y a lo que no estábamos acostumbrados y menos en un país en
el que se supone que no existen las prisas. En cuanto la banca se detuvo,
ya teníamos que estar preparados para saltar al agua.
En esta nuestra
primera inmersión nos pillo algo de sorpresa y cuando quisimos reaccionar
ya estaban todo el grupo en el agua. La composición de los grupos nunca
superaban las seis personas, si así fuese se dividían los grupos en
varias embarcaciones.
Como de los errores
se aprende en las inmersiones posteriores nosotros erramos los que primero
estábamos en el agua dejando atrás a los nuevos. La sabiduría es un
grado.
Empezamos
el descenso hasta los 22 metros donde una corriente suave nos iba a
conducir por encima de una explosión de color y formas. Lo primero que
nos sorprende es la cantidad enorme de crinoideos que de manera
espectacular encuentras a cada sitio que diriges la mirada.
Los
había amarillos(Comanthina nobilis),negros y amarillos, (C.audax),
marrones y blancos (Stephanometra sp.) La lista seria interminable.
Seguramente, si imagináramos un color encontraríamos un crinoideo del
color que lo hubiésemos imaginado.
Pero
la lista no se acaba aquí: Corales pétreos, alcionarios, gorgonias de
los mas diversos colores, algo que de forma increíble aumentaría al
llegar a las aguas someras donde terminaríamos la inmersión después de
una hora en las que nos fue imposible almacenar en nuestra mente todo lo
que pudimos contemplar.
Ya
en la embarcación un solo reproche, la falta tal vez de algo más de
fauna.
ST
CHRISTOPHER
La
inmersión de la tarde en este carguero, del que sólo quedan las
cuadernas, nos depara una grata sorpresa. Después de descender hasta los
25 metros en los que se encuentra el pecio, que descansa sobre un fondo de
arena, damos con una curiosa
serpiente arlequín (Myrichthys columbrinus) que curiosa se acerca
para dar una vuelta alrededor de nosotros. Un minuto mas tarde se aleja
pausadamente por donde había venido.
Lo queda de aquel
carguero parece hacer sido divido en territorios habiéndolos ocupado por un lado unos seis especímenes de pez
murciélago (Platax orbicularis) y por otro lado un cardúmen
totalmente compacto de peces gato (Plotosus lineatus). Solo un pez
león de considerable tamaño (Pterois volitans) se mueve a su
anchas por donde se le antoja, a sabiendas de que sus venenosos dardos harán
que cualquier intruso demasiado curioso desista
en acercarse demasiado.
A
sabiendas de que su forma
nada convencional le hará pasar totalmente desapercibido, dos peces
anzuelo (Antennarius loccineus y Antennarius nummifer)
descansan tranquilos entre las costillas del barco sin inmutarse lo más mínimo
cuando nos acercamos para fotografiarlos.
CANYON
Hasta
el momento las inmersiones superaban todas nuestras expectativas en cuanto
a la alegría de colores que se podía vivir en el fondo, tal vez como
dije antes echábamos en falta algo más de fauna y en concreto el
avistamiento de algún pelágico. Con la inmersión
en "The Canyon" todo iba a
arreglarse.
Antes
de lanzarnos al
agua,
impacientes como siempre, el instructor nos recuerda lo que ya nos había
dicho antes en el briefing. Este es
un lugar de fuertes corrientes y sobre todo al finalizar hay que realizar
un ascenso libre desde un fondo de
30 metros, donde contaremos con la inestimable ayuda de una corriente que nos obligara a hinchar el chaleco.
Empezamos
a descender y un cardúmen de barracudas pasa totalmente insolente
delante de nuestros ojos, seguimos el descenso y llegamos al primer cañón.
Qué decir de lo que allí vemos... La lista seria demasiado extensa. El
espectáculo es maravilloso y acaba con todas nuestras dudas.
Nos
desplazamos hacia otro de los cañones pasando por una pequeña plataforma
de arena sembrada literalmente de esponjas de barril (Xestonpongia
testudinaria).
Al
comienzo del segundo cañón
,una enorme gorgonia blanca de unos 3 metros (Subergorgia mollis)
tapiza por completo la entrada de un pequeño hueco en la pared. En este
otro lado el espectáculo sigue siendo el mismo, una biodiversidad increíble
que nos hace mantener las esperanzas en torno a una recuperación de la
fauna marina. Pero todo lo bueno tiene un final y cuando vemos que John
consulta el ordenador sabemos que este es el final de esta magnifica
inmersión.
Comenzamos
el ascenso y comprobamos que no exageraban en nada en cuanto a la
corriente descendente que parece querer invitarnos a quedarnos un rato más.
Pero las ordenes eran estrictas, nada de descompresión ,así que
hinchamos nuestro chaleco, aleteamos con fuerza y al de unos pocos metros
de ascenso notamos que la corriente disminuye. Es momento de desinflar
el chaleco y continuar subiendo tranquilamente. Nos queda aun una pequeña
parada de seguridad que
realizaremos sin ninguna mala gana. Todavía podíamos tener alguna
sorpresa, pensamos......
NUDIBRANCH
CITY
¿Quieres
ver nudibranquios? pues bucea en "Nudibranch City".
Como
a casi todas las zonas de inmersión, llegamos después de corto paseo en
barca. Saltamos al agua para dejarnos caer en un fondo de no mas de
seis metros. Una multitud de corales acrópora (A.magnifica, A.cervicornis,
A.digitifera, etc.) nos dan la bienvenida.
Dando
por concluida esta pequeña parada, seguimos el descenso por una suave pendiente.
Nos lleva un rato encontrar nuestro primer nudibranquio, pero después de
hacerlo, como por arte de magia van apareciendo uno detrás de otro. No
damos abasto.
Mi
compañera de buceo me llama con su avisador acústico, ha encontrado uno
que le parece mas bonito que el anterior. El despliegue de colores de
estos gasterópodos parece no tener fin. De otro lado recibo otra llamada
esta vez de Ben, otro de los instructores, parezco un correcaminos de un
lugar a otro.
Al
final decido hacerme el sordo y poder así admirar sin interrupciones a
estas maravillosas criaturas.
Chromodoris magnifica, Phyllidia varicosa, Nembrotha
kubaryana, Chromodoris elizabethina... seguir seria muy fácil,
pero lo mejor, sin duda, es poder admirarlos.
HOLE IN THE WALL
Este buceo es uno de
tantos que no ofrecen ninguna dificultad y que tal vez debido a la innata
curiosidad del ser humano, pueden convertirlo en un mal recuerdo. El
fondo, a 14 metros y con una ligera
corriente hace de este buceo un paseo apto para todos los niveles, solo
una complicación, un agujero en medio de una pared el cual se puede
atravesar sin ninguna dificultad, simplemente manteniendo una buena
flotabilidad.
El problema viene
dado exclusivamente por la curiosidad de saber por qué no se puede
atravesar por encima siendo así mucho mas fácil. Simplemente, la
corriente te alejaría del
grupo impidiéndote bajar de nuevo a no ser que aletees como seguramente
no lo hayas hecho nunca.
El
resto de la inmersión hasta llegar a las aguas poco profundas seguirá
proporcionándonos innumerables recuerdos. En esta inmersión podemos
destacar la gran cantidad de corales blandos que se dejan mecer por la corriente para
encontrar así su alimento, Dendronephthya sp, Heteroxenia
fuscescens, Anthelia glauca, etc,etc,etc.
SABANG JUNK
Esta
inmersión recibe el mismo nombre que la primera que realizamos en el
mismo lugar pero esta vez visitaremos dos pecios que se encuentran a 18
metros, también sobre un fondo de arena.
Ben, el instructor
ha cogido unos cuantos plátanos del restaurante, nos comenta que los va a
utilizar para dárselo a los peces. Feeding con plátanos? con huevo duro
ya lo habíamos visto, pero con plátanos.....
Pues
cierto es ,cuando nos acercamos al primero de los barcos, un junco chino
una multitud de Platax y de peces ángel se acercan hacia él. Están
bien enseñados y esperan pacientemente su turno. En un santiamén devoran
todos los plátanos después, claro está, de que nos hagamos la
pertinente foto.
Seguimos con nuestro recorrido hasta el segundo pecio, un yate que se
encuentra en bastante buen estado. Unos cuantos peces piedras nos invitan
a que tengamos mucho cuidado en donde ponemos las manos.
Una
vez terminado el tour por los dos pecios, volvemos poco a poco a
acercarnos hacia la costa y nuestros ojos se vuelven a iluminar. Incluso
nos encontramos con los restos de una avioneta que ya empezaba a ser
colonizada por todo tipo de invertebrados .Es curioso poder observar como
en una zona de esta inmersión nos encontramos con una cantidad incontable
de corales del genero Fungia esparcidos por el fondo como si un
barco hubiese soltado su carga componiéndose única y exclusivamente de
este tipo de corales.
SHARK CAVES
Como no nos queríamos
marchar sin ver tiburones era visita obligada esta inmersión que
realizamos en ultimo lugar.
Descendemos
hasta un fondo a 32 metros plagado de pequeñas cuevas donde esperamos
encontrar escualos del genero puntas blancas, así como algún gris. Pero
la búsqueda no es nada fructífera y algo desilusionados comenzamos el
ascenso por la pared.
Un
ultimo vistazo a todas estas maravillas que nos han acompañado durante
estos días. Atrás dejamos ,anémonas gigantes con sus inseparables huéspedes,
los peces payasos, un pez globo de color amarillo que nos mira con sus
grandes ojos nos recuerda la dulzura de estos preciosos animales (que se
siguen pescando para exhibirlos como souvenir para turistas), esponjas que
como sus primos los corales han adoptado todo tipo de formas, peces que
parecen haber sido pintados por una manos artesanas, colonias de madréporas
que hacen que les busquemos semejanzas paralelas en el exterior, en fin
multitud de recuerdos que hacen de este lugar un destino que debería
unirse a los ya conocidos por todos nosotros como son, Maldivas, Mar Rojo
o Cuba.
Hazme
caso, ven y disfrútalo, no te sentirás defraudado.
GALERÍA
FOTOGRÁFICA
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© Texto y Fotos : Íñigo Almenara
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