El Grapissar
Un nuevo espacio submarino
protegido
Publicado en el número 29 de Catalunya Rural i Agrària
por M.Lobera, F.López y J.Rodon


Localización del área protegida. |
n aplicación de la Ley 4/1989 del 27 de Marzo,
sobre la conservación de espacios naturales y de la flora y la fauna silvestre, el
D.A.R.P. (Departament d'Agricultura, Ramaderia i Pesca de la Generalitat de Catalunya),
haciendo caso de las propuestas del grupo submarinista
Sotavent, de la
localidad del Vendrell (Tarragona), ha propuesto la protección de un nuevo espacio
submarino.
Se trata de una zona marítima delante del término municipal del Vendrell, cerca del
puerto deportivo de Comarruga, denominado popularmente La Masía Blanca.

La posidonia, una planta típica de
estos fondos |
Si se compara con los
espacios protegidos de las Islas Medes o del futuro parque de Cap de Creus, éste es un
espacio relativamente pequeño, tan solo 22 hectáreas. El hecho de que esté a pocos
metros de la playa y que sus fondos arenosos alberguen gran variedad de organismos
vegetales y animales en aguas poco profundas, hace que este lugar sea especialmente
atractivo.
Con el decreto de
protección se prohibe la pesca en cualquiera de sus modalidades, el fondeo de
embarcaciones y la navegación en el área protegida. Además, se controlan las visitas y
se crea un Consejo Asesor.

Esponjas y otros organizmos
bentónicos de la zona |
Sin duda, esta protección
conservará un espacio óptimo para la puesta y el reclutamiento de organismos, se
preservarán los herbazales adyacentes y se convertirá en una buena alternativa al
turismo que, atraído especialmente por el parque de Port Aventura, visita la zona.
La experiencia de las Islas
Medes es una buena referencia para poder afirmar que los espacios submarinos protegidos se
transforman en una fuente de riqueza y de civismo. Desde que se protegieron las Islas
Medes, no solo se han recuperado la flora y la fauna del fondo marino, sino que a su
alrededor crece y se mantiene un turismo que, respetando la naturaleza, disfruta de sus
encantos.

Un típico compañero de inmersión:
la cabrilla |
Con estas medidas de
protección, el Grapissar de la Masía Blanca se convertirá también en una nueva reserva
del ecosistema marino, a la vez que en centro de atracción para las actividades
deportivas de calidad, como la inmersión, y también en un espacio educativo, donde se
pueden crear gran número de itinerarios educativos y culturales, accesibles a los
estudiantes y a los amantes de la naturaleza.

ACTUALIDAD
La reserva marina de Masia
Blanca tiene finalmente (2004) este perfil:


Fuente: Xavier Escribà (Sotavent)

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F.López y J.Rodon |